Lo que necesitas para congelar la mantequilla
Bolsas de Congelación Herméticas Ultra-Zip® Albal®
y por supuesto la mantequilla
¿Compraste mantequilla y ahora tienes que almacenarla?. O ¿te queda algún trozo en la nevera? No hay problema, la mantequilla se puede congelar muy bien.
Usamos la mantequilla para muchos platos. Es perfecta para hornear, para freír o para untar en pan. Por eso, vale la pena tener un pequeño suministro de mantequilla en casa. Y lo mejor es que la mantequilla se puede congelar muy bien. Ya sea en pequeñas porciones, o como una pieza entera. En nuestro consejo explicamos cómo se puede congelar la mantequilla y cómo podemos extender fácilmente su vida útil.
Bolsas de Congelación Herméticas Ultra-Zip® Albal®
y por supuesto la mantequilla
La mantequilla se puede congelar fácilmente, ya sea en un trozo entero o media porción con el embalaje original, e incluso en pequeñas porciones. Normalmente, se recomiendan porciones de 125 gramos, sobre todo, si se van a hornear pasteles o galletas.
Pon la mantequilla en una Bolsa de Congelación Hermética Últra-Zip® Albal® manteniendo su embalaje exterior. Elimina el aire de la bolsa y ciérrala herméticamente. La mantequilla está lista para congelar.
La mantequilla puede mantenerse durante nueve meses en el congelador. Y para asegurarnos de no olvidarnos de ella, la Aplicación Foodsaver de Albal® nos recordará hasta qué fecha la podemos usar.
La mantequilla se debe descongelar antes de usar. Para ello, coloca el trozo de mantequilla en un plato y descongélalo en el frigorífico o a temperatura ambiente. Después de descongelarse, podrás usarla tanto para hornear, como para freír o directamente para untar.
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