Nuestros consejos y trucos para congelar frutos secos
Consejo n.º 1:
Puedes congelar tanto los frutos secos sin cáscara como los ya procesados en trozos, picados o molidos. Además, también puedes congelar cualquier tipo de fruto seco: almendras, nueces, anacardos, etc.
Consejo n.º 2:
Congela los frutos secos lo más frescos posible. No esperes hasta la fecha de caducidad, ya que cuanto más frescos estén al congelarlos, más tiempo durarán.
Consejo n.º 3:
Divide los frutos secos en porciones antes de congelarlos, si es posible. De esta forma, luego podrás sacar del congelador la cantidad exacta que necesites y evitarás el desperdicio de alimentos. Si quieres congelar los frutos secos enteros, repártelos uniformemente en un plato y congélalos así durante una hora aproximadamente para evitar que se peguen unos con otros. Pasado este tiempo, coloca las porciones en bolsas de congelación herméticas Ultra-Zip® de Albal®. Más tarde podrás sacar fácilmente la cantidad que necesites y volver a cerrarla.