Congelar verduras paso a paso
Las verduras que se utilizan para hacer caldos y sopas son una combinación de varias hortalizas de raíz (zanahoria, apio, nabo), aunque también suelen llevar puerros o hierbas. Si eres de esos a los que les gusta cenar un caldo caliente en invierno, te encantará descubrir estos sencillos pasos para congelar y conservar las verduras que necesitas en porciones. De esta forma, podrás utilizarlas rápidamente cualquier otro día para hacer un delicioso caldo de verduras o una base aromática ideal para diversos platos.
- En primer lugar, lava bien las verduras para eliminar los restos de arena y tierra. Para limpiar bien las zanahorias, el apio o las patatas, te recomendamos utilizar un cepillo para verduras.
- Arranca las hojas de las zanahorias y los extremos de las verduras.
- Corta todas las verduras en trozos pequeños del mismo tamaño.
- Escalda las verduras: pon a hervir una olla con agua salada y cuece las verduras durante 3 minutos.
- Cuando haya pasado este tiempo, sácalas con una espumadera y enfríalas. Te recomendamos enfriarlas lo más rápido posible: haz cubitos de hielo con las bolsas de cubitos de hielo de Albal® y echa las verduras en un bol lleno de cubitos.
- Una vez que se hayan enfriado, escurre bien las verduras.
- Ahora mete las verduras escaldadas en las bolsas de congelación herméticas Ultra-Zip® y guárdalas en el congelador.